Corrección Actividad Bloque 4

• Actividad lúdico-didáctica de ortografía:

Pasos y pasos.

Los niños se ponen en fila. Cada vez que el profesor diga una palabra llana con tilde, dan un paso al frente; cuando diga una sin tilde, dan un paso atrás; si dice una que no es llana, se quedan en el sitio... y así se van eliminando. Puede hacerse igual con otras reglas como la b y la v; la g y la j...

El curso en el que voy a implantar esta actividad es en 5º de Primaria ya que en el Currículo Oficial de la Comunidad de Madrid en el apartado 48 viene lo siguiente:

Clasifica las palabras en agudas, llanas, esdrújulas y sobresdrújulas. 

Debido al conocimiento previo del curso anterior donde vienen algunos objetivos totalmente relacionados como por ejemplo:

35. Distingue la sílaba tónica en las palabras.

36. Clasifica las palabras por el número de sílabas (monosílaba, etcétera.) y por el lugar que ocupa la sílaba tónica (agudas, etcétera).

37. Coloca la tilde en aquellas palabras que la necesitan aplicando las reglas generales de la acentuación ortográfica.

Pienso que es esta actividad está adecuada totalmente al curso que he elegido.

A la hora de plantear cualquier actividad para nuestros alumnos, siempre tendremos en consideración el siguiente proceso de trabajo:

PREPARACIÓN

1. Objetivos:

• Saber diferencias entre palabras llanas, agudas y esdrújulas.
• Desarrollar la agilidad mental.

2. Material

El profesor tendrá esta lista de palabras como apoyo a las que el tenga pensadas o preparadas.

3. Forma de llevarla a cabo

La mejor forma de llevarla a cabo puede ser en el aula, siempre y cuando adaptemos el mobiliario y la disposición para que se pueda realizar la actividad de forma cómoda para los alumnos.
También se podrían utilizar otros espacios disponibles en el centro escolar como el patio, el gimnasio, etc.


PUESTA EN PRÁCTICA

1. Evaluación inicial

Para introducir el tema, se hará una puesta en grupo inicial para que todos los alumnos puedan recordar y repasar las reglas de las palabras que vamos a tratar y también servirá para el profesor de forma que podrá ver el nivel del grupo respecto a este tema.

En caso de que en alguna de las palabras y reglas el grupo clase no consiga recordarlo se explicará la regla a través de este cuadro:

2. Explicación de la actividad

Tras la evaluación inicial se explicará la actividad. El profesor deberá explicar la actividad con dos o tres alumnos más, Se pondrán en fila y aclarará que cuando él diga una palabra llana con tilde, dan un paso al frente; cuando diga una sin tilde, dan un paso atrás; si dice una que no es llana, se quedan en el sitio, etc.

3. Ejemplo

Después de esto, el profesor con una o dos palabras hará una demostración con los demás alumnos para que sirva como ejemplo y visualicen como se va  realizar la actividad.

4. Los alumnos ejecutan la tarea

Si es oral, procuraremos hablar lo menos posible y escucharlos a ellos. Si es escrita, pasaremos por los grupos o por las mesas individuales para fijarnos si están teniendo dificultades y resolver dudas.

EVALUACIÓN

1. Corrección de la actividad en grupo

El profesor, tras haber visto de las palabras trabajadas cual les han resultado más difíciles o en cuales han fallado más los alumnos, pasará a repasar con ellos las reglas y el por qué de la clasificación de dichas palabras.

2. Como maestros, evaluaremos los objetivos que nos habíamos planteado. Si se han cumplido, si no y por qué.

El profesor podrá observar y hacer anotaciones durante la actividad de la agilidad o agudeza mental de los alumnos para poder hacer una globalización junto a muchas otras actividades y poder hacer un diagnóstico de cada uno. De esta forma el profesor podrá reforzar este entrenamiento mental en caso de que el alumno lo necesite.

Y por otro lado, por supuesto, el aprendizaje de los alumnos para distinguir las palabras llanas, agudas y esdrújulas y sus normas.

3. Escuchar la opinión de los alumnos. 

Preguntaremos a los niños si les ha resultado fácil o difícil la actividad y por qué. Si les ha gustado realizarla y por qué. De este modo evaluaremos sus
motivaciones y sus capacidades de cara al planteamiento de futuras actividades.

4. ¿Ven verdadera utilidad los niños en la actividad que hemos hecho?

Preguntaremos también a los niños qué creen que han aprendido haciendo esa actividad. Para qué creen ellos que sirve. La mejor motivación es siempre la utilidad (aunque nosotros pensemos que es el divertimento). Nunca hacemos con gusto algo que pensamos que no sirve para nada.

Tras este momento donde los alumnos dan su opinión, el profesor por su parte también debe cerciorarse de que todos los alumnos se dan cuenta de las estrategias que han utilizado y también que los alumnos hayan seguido malas estrategias en ese momento, también se den cuenta.

En el caso de que ellos no sepan decir  en ese momento que han aprendido con esa actividad, deberemos ser nosotros los que les expliquemos lo que hemos hecho con esa actividad y lo que hemos aprendido. Para esa explicación  no hay mejor forma que hacerlo con ejemplos que ellos vean utilidad en su vida diaria o situaciones motivadoras para ellos. Como por ejemplo explicarles que sabiendo las palabras llanas, agudas y esdrújulas sabremos en que posición poner la tilde en el caso de que no nos acordemos o no conozcamos la palabra.

Actividad lúdico-didáctica de semántica y vocabulario:

La palabra viva.

Adivinar una palabra por medio de la mímica.

Esta actividad es adecuada para el primer o segundo ciclo de Primaria. Es una actividad conveniente para ampliar la gama de vocabulario y palabras de los alumnos. En todo caso sería conveniente adecuar como profesores las palabras de la actividad así como su dificultad dependiendo del curso donde lo vayamos a realizar.

PREPARACIÓN

1. Objetivos:

• Ampliar el rango de vocabulario de los alumnos.
• Divertirse aprendiendo.

2. Material

El profesor tendrá una tarjeta con los siguientes temas en caso de que el alumno no tenga la palabra con la que va a hacer la mímica.

3. Forma de llevarla a cabo

Esta actividad se puede hacer en el aula, pero antes hay que adaptar la clase y el mobiliario para que se pueda realizar de forma correcta como he mencionado en la primera actividad. Es muy importante que la clase para este tipos de actividades este dispuesta de una forma concreta donde los alumnos se sientan cómodos y puedan hacer la actividad correctamente.

PUESTA EN PRÁCTICA

1. Evaluación inicial

Antes empezar la actividad, debemos de hacer una estimación del nivel de vocabulario de nuestros alumnos. Esto, más que en una comprobación antes de la actividad, el profesor debe saber el nivel de la clase en cuanto a semántica y vocabulario y también de cada alumno, ya que durante el transcurso del curso el profesor debe estar también atento a eso.

2. Explicación de la actividad

La actividad se realizará por los grupos de trabajo cooperativo que están dispuestos en la clase. Cada grupo tiene 4 integrantes. Teniendo en cuenta que una clase tiene entre 20 y 24 alumnos, habrá 5-6 grupos para realizar la actividad.

El profesor explicará que cada vez, será el turno de uno de los grupos y a su vez, el turno de cada integrante, de forma que irá en orden, un turno cada grupo y persona. Una vez que uno de los grupos haya participado, se pasará al siguiente grupo. Cada turno debe hacer el juego un integrante diferente del grupo para que todos participen.

3. Ejemplo

El profesor dará la palabra fotografía a uno de los integrantes de uno de los grupos. El alumno intentará que sus compañeros del grupo adivinen la palabra a través de su mímica, sin que se pueda hablar ni emitir sonidos.

Esta situación servirá como ejemplo para que la clase vea y analice como se va a llevar a cabo la actividad.

4. Los alumnos ejecutan la tarea

Si es oral, procuraremos hablar lo menos posible y escucharlos a ellos. Si es escrita, pasaremos por los grupos o por las mesas individuales para fijarnos si están teniendo dificultades y resolver dudas.

EVALUACIÓN

1. Corrección de la actividad en grupo

En este caso, los alumnos pueden dar su opinión y consejos al resto de los compañeros sobre como mejorar su mímica o como hacerlo mejor. De esta forma, todos podrán participar y dar su opinión de la mímica y de la actividad que han realizado.

2. Como maestros, evaluaremos los objetivos que nos habíamos planteado. Si se han cumplido, si no y por qué.

Deberemos darnos cuenta como maestros que los alumnos se hayan divertido en la actividad y debemos apreciar esa felicidad. Igualmente mientras nos damos cuenta de eso, debemos apreciar que su vocabulario y semántica ha mejorado o aumentado.

3. Escuchar la opinión de los alumnos. 

Preguntaremos a los niños si les ha resultado fácil o difícil la actividad y por qué. Si les ha gustado realizarla y por qué. De este modo evaluaremos sus

motivaciones y sus capacidades de cara al planteamiento de futuras actividades.

4. ¿Ven verdadera utilidad los niños en la actividad que hemos hecho?

Preguntaremos también a los niños qué creen que han aprendido haciendo esa actividad. Para qué creen ellos que sirve. La mejor motivación es siempre la utilidad (aunque nosotros pensemos que es el divertimento). Nunca hacemos con gusto algo que pensamos que no sirve para nada.

Tras este momento donde los alumnos dan su opinión, el profesor por su parte también debe cerciorarse de que todos los alumnos se dan cuenta de las estrategias que han utilizado y también que los alumnos hayan seguido malas estrategias en ese momento, también se den cuenta.

En el caso de que ellos no sepan decir  en ese momento que han aprendido con esa actividad, deberemos ser nosotros los que les expliquemos lo que hemos hecho con esa actividad y lo que hemos aprendido. Para esa explicación  no hay mejor forma que hacerlo con ejemplos que ellos vean utilidad en su vida diaria o situaciones motivadoras para ellos. En este caso podremos argumentarles lo importante que es saber nuevo vocabulario para utilizarlo en nuestra vida cotidiana o para que se nos pueda entender mejor cuando estamos hablando de algo. También en el momento de preguntar sobre algunas cosas que quieran saber, etc.